El presidente del Centro de Hoteles de Punta del Este, Antonio Soto, dijo que mientras que el viernes en promedio la ocupación hotelera había llegado a 45%, para sábado y domingo trepó a 80%. Eso, aclaró, en el caso de los hoteles que trabajaron con grupos. En el resto de la hotelería se alcanzó una ocupación de entre 50% y 60%, añadió.
Soto dijo que "mucha gente" visitó el balneario durante el fin de semana. La oferta de varias actividades (Día del Patrimonio y la fiesta Punta Weekend, entre otros) atrajo a una buena cantidad de público, que llegó desde otras partes del país, así como de Argentina y Brasil, países donde también el aniversario de la llegada de Cristóbal Colón al continente americano estiró el fin de semana. "Se notó el movimiento turístico", señaló Soto, y agregó que fue "alentador" para el destino.
Para el presidente de la Liga de Punta del Este, Andrew Beare, que el feriado cayera un lunes calzó como anillo al dedo, y apuntó que pese al mal tiempo el balneario "revivió en cuanto a gente". De acuerdo a sus estimaciones, en hotelería la ocupación estuvo en promedio por encima del 70%. En tanto, señaló que en las inmobiliarias hubo "mucha gente consultando, pero poca concreción".
Los restaurantes también vivieron un buen fin de semana. El presidente de la Corporación Gastronómica de Punta del Este, Leandro Quiroga, dijo que la mayoría de los establecimientos trabajaron "por encima de lo esperado".
Por su parte, el alcalde de Punta del Este, Andrés Jafif, destacó el buen movimiento que hubo tanto en el sector hotelero como en el gastronómico, donde se trabajó "muy bien". El sector inmobiliario, en tanto, no vio tanto movimiento, debido a la postergación en la concreción de los alquileres que se viene observando desde hace años, explicó.
Pese a que calificó el fin de semana largo como "muy positivo", el alcalde puntaesteño aclaró que hoy es "un fin de semana más, ya no es el termómetro de cómo pueda venir una temporada".
Qué esperar para el verano
De cara a los meses de zafra estival, Jafif se mostró confiado en que serán iguales o mejores a los del año pasado. De todas maneras, indicó, algunos sectores –como el inmobiliario y el comercio minorista, "los que están sufriendo un poco estos años complejos"– lo tendrán más cuesta arriba.Los operadores privados también fueron positivos al hablar de la próxima temporada de playa. Quiroga apuntó que, frente a veranos anteriores, el tipo de cambio actual, junto con la inflación en Argentina, configuran un escenario más auspicioso. El presidente de la Liga de Punta del Este opinó en el mismo sentido: "Va a ser mejor, va a haber más movimiento", dijo Beare.
Por el lado de los precios, el alcalde sostuvo que si el destino es competitivo –lo que no quita que esté más arriba que Argentina en materia de precios– "la opción siempre va a ser venir a Punta del Este". Para Jafif, lo que no debe sacrificarse es el prestigio alcanzado por el balneario.
"Si estamos un poco más altos que la costa argentina, el turista que quiere disfrutar de sus vacaciones estamos convencidos de que va a elegir a Uruguay, por Punta del Este", redondeó.
En tanto, Quiroga afirmó que "necesariamente" habrá un ajuste en precios uruguayos, dado el aumento en los costos, pero que será "mínimo": entre 5% y 10%.
Según Beare, qué hacer con las tarifas es "la preocupación del momento", porque los comerciantes "no pueden seguir absorbiendo costos cuando los impuestos siguen igual". El empresario instó a cuidar la actividad turística, "la gallina de los huevos de oro".
Argentinos y brasileños
Para concretar reservas –en especial en el rubro alquileres– algunos argentinos aguardan que pasen las elecciones presidenciales, que se celebrarán el 25 de octubre. "El argentino está expectante de lo que va a pasar. Ya se sabe que va a ser (electo el candidato oficialista Daniel) Scioli, pero el ser humano toma las cosas en cuenta cuando han sucedido", dijo Beare.En este sentido, el alcalde Jafif dijo que las exoneraciones impositivas acordadas por el Ministerio de Turismo jugarán a favor, sobre todo en la llegada de turistas del otro lado del Río de la Plata.
La devaluación del real, en tanto, no mermará la cantidad de brasileños que elijan Punta del Este, aventuró Jafif. "Es un mercado que hay que trabajar fuerte, que nos está costando entrarle, pero el público brasileño de buen nivel que viene lo vimos este fin de semana en Punta del Este", dijo. En general todos se manifestaron en el mismo sentido. "Quienes vienen a Punta del Este, van a venir igual", apuntó Beare.
El mes pasado el poder de compra de los uruguayos que viajaron a Brasil encontró techo y alcanzó el máximo histórico en al menos 10 años, después de cinco meses consecutivos de aumento, según el Índice de Capacidad de Consumo en el Exterior de El Observador.
Pero en los primeros 13 días de este mes, el fortalecimiento que mostró el real frente al dólar (4,8%), frente a la relativa estabilidad del peso uruguayo en relación con el billete verde (0,04%), provocó que el poder adquisitivo de los turistas locales en Brasil se deteriore 7,6% frente al mes de agosto. De todas maneras, todavía se mantiene 15,9% respecto a octubre del año pasado y 56,1% por encima del promedio de los últimos 10 años.
Frente a Argentina, la situación es distinta. La capacidad de consumo en ese país se está alejando de los máximos valores alcanzados durante fines de 2013 y 2014, por lo que los uruguayos están sintiendo el efecto en sus bolsillos al momento de decidir comprar al otro lado del Río de la Plata.
En lo que va de octubre, el turista uruguayo podía adquirir en Argentina 17,9% menos bienes y servicios que en igual mes de 2014. De este modo, acumula 12 meses consecutivos de deterioro en la medición interanual, aunque respecto a la media de los últimos 10 años, el poder de compra se encuentra 25,1% por encima. En octubre del año pasado, los uruguayos tenían un poder adquistivo en Argentina 56,9% mayor que en el promedio desde 2005.
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