La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) —un órgano de Naciones Unidas— estimó que en 2015 la pobreza y la indigencia habrían aumentado a 29,2% y 12,4% de la población respectivamente (en 2014 esas tasas habían sido de 28,2% y 11,8% respectivamente).
"Eso implica que 175 millones de personas se encontrarían en situación de pobreza por ingresos en 2015", 7 millones más que en 2014, señaló el estudio "Panorama social de América Latina 2015" de la Cepal. A su vez, de esos 175 millones, 75 millones "estarían en situación de indigencia" (5 millones más que en 2014).
El incremento de la pobreza se enmarca dentro de un bajo desempeño de la economía en Latinoamérica, la que se habría contraído un 0,4% en 2015.
Los datos de 2015 son una estimación y solamente están a nivel regional. Los datos por país del informe de la Cepal son hasta 2014.
Allí, Uruguay es el país de la región que más redujo la pobreza en el quinquenio 2010-2014, una baja "a una tasa equivalente anual de 14,9%". Lo siguen Perú (-9,8%), Chile (-9,1%) y Brasil (-7,9%).
Según los datos de Cepal, en 2014 la pobreza afectaba a 4,5% de la población uruguaya y 2,9% de los hogares. De ellos, 0,6% y 0,7% eran indigentes respectivamente.
"Por su parte, en la República Bolivariana de Venezuela, Honduras y México se registró un aumento de la tasa de pobreza", agregó. Fueron los únicos, ya que en Costa Rica se mantuvo prácticamente estable en el quinquenio.
Al explicar la baja de la pobreza en la mayoría de los países de la región entre 2010 y 2014, la Cepal expresó que "el crecimiento del ingreso dio origen a dos tercios o más de la caída de la pobreza en el Paraguay, el Estado Plurinacional de Bolivia, Panamá, el Perú y Colombia. En otros seis países, se situó entre el 55% y el 65% del total (Ecuador, Argentina, Brasil, Chile, El Salvador y Uruguay)". En tanto, "en la República Bolivariana de Venezuela, Honduras y México, el decrecimiento de los ingresos se constituyó en el principal factor de aumento de la pobreza".
"Dado que la fuente principal del ingreso de los hogares en situación de pobreza proviene del mercado laboral, la segunda perspectiva se enfoca en el resultado de la participación de los hogares pobres en ese ámbito", explicó la Cepal.
Así, "la mejora del ingreso laboral se debió, mayoritariamente, al incremento del ingreso laboral medio por ocupado. Tal es el caso del Brasil, el Ecuador, el Paraguay, el Perú y el Uruguay", añadió.
"América Latina debe generar más empleos de calidad, con derechos y protección social, cautelar el salario mínimo y proteger el gasto social, que muestra una merma en su ritmo de crecimiento", dijo Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal, al presentar el informe.
El 1% más rico tenía 14% del ingreso total.
Una parte del informe de Cepal fue dedicada a la desigualdad del ingreso, basadas en datos tributarios con "la premisa de que las encuestas de hogares tienen limitaciones para captar los ingresos muy elevados".
En el caso de Uruguay, los últimos datos son de 2012 y allí la Cepal encontró que el 1% más rico capturaba el 14% del ingreso total del país. "En la Argentina y el Uruguay los niveles de participación de los más ricos en el ingreso total eran más altos que los verificados en los países continentales de Europa Occidental y en el Asia Sudoriental", expresó el informe. En el caso de Argentina llegaba al 16,8%. Por su parte, en Colombia el 1% más rico "capturaba el 20,5% del ingreso total del país". Agregó que "al combinar los datos tributarios del 1% más rico con los ingresos captados por las encuestas para el 99% restante, se aprecia que en Colombia y el Uruguay el coeficiente de Gini (que mide la distribución del ingreso) corregido se ubica entre 2 y 4 puntos porcentuales por encima del estimado solo sobre la base de las encuestas". Es decir, la distribución del ingreso corregida de Uruguay es algo peor que la que se ve.
