jueves, 9 de mayo de 2013

CARMELO CRECE


Una de las postales más típicas de Carmelo, ciudad ubicada en el departamento de Colonia, es su puente giratorio, que atraviesa el arroyo Las Vacas y que en 2012 cumplió 100 años. Quien ingresa a Carmelo desde Montevideo, hoy ve a la derecha de ese ícono un gran cartel que indica que ahí se está levantando Arroyo Carmelo, el primer edificio premium del lugar, de acuerdo a sus responsables.
Esta no es una inversión aislada. En los últimos años, la zona se ha convertido en terreno fértil para varios desarrollos, la mayoría de ellos ubicados en las afueras del casco de la ciudad.
De acuerdo a un informe de la Asociación de Desarrolladores de Colonia (ADC) sobre la situación de las inversiones inmobiliarias en Carmelo y su área de influencia, en un radio de 20 kilómetros del aeropuerto de Zagarzazú, están en ejecución siete proyectos inmobiliarios. Otros siete están en etapa de evaluación. Según este documento, estos proyectos presentan como diferenciales tres características del lugar: el río, las bodegas –la actividad vitivinícola tiene más de 100 años en la zona–, y el golf.
El capital argentino es protagonista claro de los desarrollos inmobiliarios que se está viendo en la zona. Asimismo gran parte de los compradores de estos proyectos también proceden del vecino país. Los consultados por Café & Negocios destacaron la cercanía del lugar para el público argentino: 15 minutos en avión desde el aeropuerto de San Fernando, u hora y media en lancha desde el Tigre.
El presidente de la Cámara Inmobiliaria Uruguaya (CIU), Gabriel Conde, comentó que la inversión argentina en Carmelo no se ve en la planta urbana, sino que se localiza en la “zona rural aledaña”, en las llamadas “chacras turísticas” y también en barrios privados. “Ahí está la inversión argentina que se palpa y se ve”, explicó.
Conde, quien tiene inmobiliaria en Carmelo, señaló que la tierra más cara se encuentra en los primeros cinco kilómetros, en las afueras de la ciudad. En esa zona el precio de una hectárea hoy puede oscilar entre los US$ 40 mil y los US$ 80 mil. Cinco años atrás, ese rango era entre US$ 25 mil y US$ 50 mil, agregó.
“Visionario” y  “precursor” 
Quien encabezó la llegada de empresarios argentinos a Carmelo fue Eduardo “Pacha” Cantón, quien hoy posee varios emprendimientos inmobiliarios y otros en carpeta en el lugar. Cantón fue quien llevó adelante el primer barrio privado del lugar, El Faro. Es también dueño del Four Seasons Resort, hotel cinco estrellas ubicado en el kilómetro 262 de la Ruta 21.  Café & Negocios intentó sin éxito comunicarse con el empresario para este informe.
El alcalde de Carmelo, Alejandro Brusco, definió al empresario como un “visionario”  y un “precursor”, que hizo “potenciar la zona”. “Detrás de él vinieron muchos más”, dijo.
Ubicación privilegiada
El alcalde Brusco destacó la ubicación geográfica de la ciudad, a medio camino entre Conchillas, donde se está levantando la fábrica de Montes del Plata, y Nueva Palmira, con su puerto y zona franca. “Estamos en el medio, brindando el servicio que los otros no pueden estar teniendo”, destacó el alcalde perteneciente al Partido Nacional.
Brusco resaltó que estas inversiones inmobiliarias también generan mano de obra, trabajo para las empresas locales e “impuestos que el gobierno nacional  y el departamental”.
Uno de los inversores argentinos que está en la zona es Diego Vigano. La Concordia, considerado “el primer barrio de viñas” de Uruguay, fue su primer desarrollo en el lugar. Se trata de un barrio privado con viñedos, que ofrece a sus moradores la posibilidad de elaborar su propio vino. Las uvas de La Concordia son procesadas en la joven bodega El Legado.
La Concordia, que se extiende por 30 hectáreas y está ubicado a cinco minutos del centro de Carmelo, está dividido en 33 lotes, 30% de los cuales ya está vendido.
Para Vigano, una diferencia de Carmelo sobre otros destinos en Uruguay es la posibilidad que ofrece para explotar el “turismo enológico”. “Es uno de los factores que va a hacer que crezca, apoyado en el resto de la infraestructura”. Vigano tiene otra inversión en la zona: la posada Campotinto. Hoy se trata de cinco habitaciones y un restaurante, pero se espera concretar otro desarrollo en ese predio de 20 hectáreas.
Para el argentino, hoy hay dos tipos de público que llegan a Carmelo. Por un lado, personas que no lo toman como su residencia permanente. Por otro, familias jóvenes que sí lo están considerando como su primera opción de vivienda, lo que se refleja en la apertura del primer colegio bilingüe en la zona.
Otro barrio privado que está tomando forma está ubicado en Carmelo Golf, cancha de golf de 18 hoyos que antes pertenecía a los dueños del Four Seasons Resort (en sus carros de golf aún se puede ver el nombre del hotel debajo del nuevo). En 2010, dos desarrolladores argentinos –Real Assets y Eidico– compraron el lugar y comenzaron a gestar el barrio privado. Se trata de 219 lotes y 12 chacras. Si bien los precios varían de acuerdo a la ubicación del terreno, en promedio por uno de 3.300 metros cuadrados el valor  es de US$ 70 mil. El 70% ya tiene dueño. Además, en lo que solían ser unas viejas caballerizas se le están dando los toques finales a siete “casas de polo”, que ya fueron adquiridas.
El gerente de Carmelo Golf, Santiago Sanz, comentó que la mayoría de los compradores lo toman como segunda residencia, si bien hay personas con interés en vivir allí. Actualmente, están en construcción cuatro casas. 
Para Sanz, “en los últimos seis o siete años la zona viene creciendo fuerte en inversiones, y el movimiento turístico que está habiendo avala la inversión”. El argentino señaló dos diferenciales de Carmelo respecto al tradicional destino de vacaciones de los argentinos en el este. En primer lugar, la cercanía. “El segundo punto que ven los argentinos cuando vienen a Carmelo es que dicen ‘esto era Punta del Este hace 30 o 40 años’. Esto está recién arrancando y tiene un potencial de crecimiento muy fuerte”, remató.
Pocas camas
Varias de las personas que hablaron con Café & Negocioscoincidieron en que, durante los fines de semana largos de Argentina o en las vacaciones, faltan camas en Carmelo para alojar a los visitantes.
“Es muy difícil seguir promocionando Carmelo cuando no tenés camas o servicios para ofrecer”, dijo el alcalde Brusco.
Vigano, por su parte, también manifestó la escasez de establecimientos de este tipo. “Cuando llega la Semana Santa o las vacaciones de los chicos, el lugar explota”, dijo.
Hay planes para construir un hotel cinco estrellas de la cadena Howard Johnson en la ciudad, que tendrá la forma de condo-hotel. El alcalde explicó que se trata de un  alojamiento de 100 habitaciones. De todas maneras, fuentes empresariales del lugar dijeron que este proyecto “está muy verde” todavía.
Montes del Plata, Nueva Palmira y su efecto
De acuerdo al presidente de la CIU, Gabriel Conde, la cercanía de Carmelo con la obra de Montes del Plata ha incidido en materia de alquileres –que vieron su precio elevarse–, pero no en ventas de propiedades. Desde que aumentó la demanda –producto de la construcción de la planta–, los alquileres en Carmelo subieron “dos veces y medio” en promedio.
El presidente saliente del Centro Comercial e Industrial de Carmelo, Daniel Bacqué, dijo que los rubros que más se han beneficiado en los últimos años gracias a Montes del Plata y Nueva Palmira han sido la construcción y los artículos del hogar. El Centro, que en 2005 tenía 80 socios, hoy tiene 400. Bacqué aventuró que sobre fin de año, cuando empiecen a irse muchos de los empleados que están trabajando en Conchillas, “se volverá un poco más a la normalidad”. “Desde el Centro siempre hemos tratado que los comercios sepan que era una situación temporaria”, comentó.
Según Bacqué, la ciudad sufre un déficit de mano de obra “relativamente preparada”, dado que Montes del Plata y las diferentes empresas que operan en el puerto de Nueva Palmira han requerido de mucho personal que solía trabajar en Carmelo: “Con los sueldos que ofrecían estas empresas, a la mayoría de los comercios les era imposible igualarlos”. 
Por su parte, el alcalde Brusco resaltó que la ciudad alberga hoy a 1.700 personas más como consecuencia de las obras en Conchillas y que los carmelitanos están aprovechando el momento: “Lo que no se sabe es si se van a mantener en el tiempo todos los comercios nuevos que abrieron”